lunes, 13 de diciembre de 2010

¿Cómo va a ser casual?

Opinión por Karina de La Càmpora Comuna 12.


Ante los hechos en Villa Soldati, damos cuenta de que existen aquellos que se refugian en la otredad para justificar desalojos violentos.

El gobierno de la ciudad acusa al gobierno nacional, el gobierno nacional exige al de la ciudad que se haga cargo de la situación. En los monopolios de medios de comunicación los fanáticos necrólogos se hacen agua la boca mientras en el sur de la ciudad siguen cayendo cuerpos. Cuerpos que están ahí, poniéndose a sí mismos en el campo de batalla, o viéndose a sí mismos, de pronto e inesperadamente, inmersos en él. La Presidenta de la Nación declara que no es ingenua, que el dolor no le afecta el trabajo neuronal. A mí y a otros tantos más nos sucede igual. Vamos… no nos quedemos en la historia del repollo: ¿cómo va a ser casual que en vísperas de un año electoral comiencen a caer vidas para que algunos tengan material de argumento opositor? Curiosamente en el día de los derechos humanos nos enfrentamos a acontecimientos siniestros: zonas liberadas, ambulancias que no pueden llegar a los heridos, trabajadores de la prensa agredidos, NN armados (menos NN de lo que parece) y un montón de etcéteras que suman a que el escenario se torne aún más turbio de lo que ya es. El conflicto habitacional, la inmigración, la indigencia, el que no se haya ejecutado gran porcentaje del presupuesto y otros ejes se pierden de vista cuando se tocan los derechos humanos.

Pero lo que más tristeza y angustia me provoca es escuchar discursos xenófobos, no sólo del jefe de gobierno que institucionaliza la otredad como causa del conflicto, sino de compañeros, de pares. Más allá del debate político sobre causas y efectos, no por querer ignorarlo, sino por hacerlo a un lado un momento para instalar la reflexión humana, es necesario que recordemos lo que para nosotros significa “nacionalismo”. Hace no mucho he leído en Página 12 una entrevista a Todorov, en la que se hablaba del nacionalismo a nivel mundial sobre este tema y me percaté de lo que este concepto implica de uno y otro lado del Atlántico. En Europa nacionalismo se vincula con la extrema derecha, mientras que en América Latina se liga directamente con los movimientos populares. Por favor, no crean que esta afirmación tiene ánimos de efectuar el mismo procedimiento de establecer una otredad, simplemente es puesta en conciencia de algo que muchos tienen inconsciente. Tal vez sean esos delirios de grandeza, esos deseos de llegar a ser “la Europa de América”, que heredamos de generaciones que se ocuparon de negar las identidades de este suelo en pos de su sueño progre.

Pobres diablos que no soportamos ser tan seres humanos como los bolitas, los paraguas, los cabecitas negras, los judíos, los musulmanes, los negros, los homosexuales, las mujeres, los foráneos. Y sólo por citar algunas minorías de la historia que han sido señalados como otro para hacer que el “yo” de estos pobres diablos no muera de angustia existencial. Es lo que Freud llamaría narcisismo de la pequeña diferencia: los que más se parecen más necesitan fabricar diferencias. La eterna dialéctica entre lo mismo y lo otro. Pero lo peor: la sinécdoque, esa operación del racismo que toma a la parte por el todo, que hace de esa característica, ese atributo (en este caso la nacionalidad) un todo. Así, el bolita es eso, un bolita, y deja de ser padre, trabajador, hermano, hijo, de tener una edad, una historia, vínculos personales, laborales, pensamientos, sentimientos… vida. Todo el ser de ese otro se resume en una particularidad a la que se le atribuye algo que a quienes están del lado del yo (y no de ese otro) les resulta dañino, nocivo, perjudicial.

¡Qué insoportable se nos hace a los pequeños mortales, aceptar que somos eso, pequeños mortales!

Yo respeto la vida, la mía, la de mis hermanos, la de todos. No importan las coordenadas de su arribo a este mundo, o sus raíces. Importa la vida. Ante el acecho de otro, yo prefiero hacer uso in crescendo del nosotros inclusivo en mi discurso: nosotros los porteños, nosotros los argentinos, nosotros los latinoamericanos, nosotros los seres humanos, nosotros los seres vivos, nosotros los todo aquello que hay en esta Tierra, nosotros parte del Universo.

K.W. 11-XII-10 (02:33 am)