domingo, 23 de enero de 2011

LA BATALLA CULTURAL SE GANA EN LA CALLE.

Militantes de La Cámpora Comuna 12 coparon este sábado las cuatro esquinas de Triunvirato y Monroe, corazón de Villa Urquiza, y entregaron volantes a los vecinos que por allí transitaban. Lejos del clima de confrontación y enojo que caracterizaba a esta zona de la ciudad, los compañeros se quedaron sin volantes para repartir y recibieron muestras de aliento a La Cámpora y de apoyo incondicional a Cristina.
Muchas personas preguntaron por el proyecto de la biblioteca que están armando en el local de Avenida Congreso y también por los talleres culturales y charlas que se van a realizar a partir de marzo.
Este año es probable que el proyecto nacional logre instalarse en la ciudad con un candidato que represente las mejores políticas de Estado, tras la gestión ineficiente, racista y represiva de Macri. Frente a eso, hay un modelo nacional contrapuesto en términos ideológicos y políticos.
Por la tarde, la actividad continuó en el local de Avenida Congreso 4464, en donde se discutió la semana politica y se recibieron donaciones para la Biblioteca Néstor Kirchner. Como viene sucediendo, se acercaron nuevos militantes y se les explicaron las distintas actividades en las que pueden sumarse para encuadrarse en este año bisagra en el que se define la continuidad de este modelo de desarrollo económico con inclusión social, que se asienta en las mejores tradiciones de nuestra historia.
Una vez más, la juventud marca presencia desde antes de las elecciones, en las que no se van a disputar sólo nombres y cargos sino la continuidad y profundización de la lucha por un país mejor. Y estos comicios son bisagra porque el bloque opositor compuesto por la vieja política menemista, los defensores del orden y el garrote, los grupos económicos concentrados, los medios de comunicación hegemónicos están dispuestos a socavar el consenso popular que mantiene la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. La batalla cultural se gana en la calle y por eso, como decía el General, la juventud tiene un rol fundamental porque es necesario el transvasamiento generacional porque "se trabaja normalmente para el futuro, y ese futuro por fatalismo histórico y biológico, diremos así, corresponde a las generaciones jóvenes. Un movimiento que sea, o que represente, una revolución trascendente, difícilmente puede ser realizado por una generación, sino por varias de ellas".