Encuesta de Ibarómetro: El kirchnerisno podría ganar la ciudad.
Lo que era inimaginable hasta hace un año hoy es una tendencia que ya reflejan las encuestas. El kirchnerismo podría ganar en la ciudad de Buenos Aires según una encuesta de Ibarómetro, con una particularidad: se preguntó sobre la próxima elección porteña nombrando los espacios pero no los candidatos, aun no definidos. El candidato “que elija Cristina” mide 29,6 % contra 22,2% del de Macri y 10,3% del de Alfonsin.
El cambio en las encuestas a la vez motiva cambio de estrategias con respecto a la fecha de las elecciones. Primero, las variaciones de fecha se causaron para tener margen en la negociación del presupuesto, pero ante la derrota legislativa de esa discusión, las dudas Pro comenzaron por ver si conviene pegar la elección de la ciudad a la nacional, ante el crecimiento de Cristina Kirchner.
Sectores de clase media, que votaron a Macri por su imagen de “empresario exitoso y eficaz” estarían dispuestos a modificar el perfil de voto, al ver que Macri hace agua precisamente en áreas de gestión administrativa. La falta de pliego de las obras del subte, el piso del teatro Colon y el estado de las calles son problemas que hacen eco en cierta tilinguería porteña (Jauretche dixit) a los que no les importa la baja de presupuesto en salud y educación o el racismo surgido luego de las tomas del Parque Indoamericano.
La ex directora de la biblioteca del teatro más importante del país difundió un comunicado donde expresa el riesgo en el que se encuentra el archivo bibliográfico del Teatro Colón. "Se actúa ahora o la pérdida del patrimonio será total”, afirmó.
En el sur, el macrismo baja en las encuestas debido a la no resolución del conflicto de las tomas que, al haber una solución que salió de la Casa Rosada, puso a la vista que el gobierno nacional estudia planes de viviendas populares, mientras que el Pro trata a los vecinos de la ciudad con extrañeza, como si el sur no existiese.
Cualquiera de los candidatos de Cristina, sobre todo los dos que mas miden en las encuestas podrían ganar la ciudad. La clave sería la unidad de todos los sectores, y que se la jueguen con entusiasmo en la campaña del candidato K. Es una buena prueba para volver a medir la política porteña bajo un “kirchnerómetro”, quedaran expuestos tanto los sectores orgánicos al proyecto nacional, como los que siguen poniendo reparos y condiciones a las decisiones de la presidenta.
Ningún candidato del kirchnerismo mide por sí solo, todos crecen siempre y cuando se le peguen a Cristina; cuanto mas asociación hay de la gente con la gestión, mas votos juntan, por lo que la decisión presidencial es poner un candidato y una lista a legisladores “ultra K”, a diferencia de la elección del 2009 donde se apostó a la centroizquierda como cabeza de la lista. El 11 % obtenido en el 2009, nada tiene que ver con el casi 30% que miden las ultimas encuestas.
