martes, 20 de mayo de 2014

Charla sobre inundaciones con el arquitecto Jaime Sorín

En el marco de los encuentros de formación política de La Cámpora Comuna 12, tuvo lugar una charla sobre inundaciones con el ex decano de la UBA y actual decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Avellaneda, Jaime Sorín, el viernes 16 de mayo en la unidad básica El Amor y la Igualdad, Saavedra. Cuando caía la tarde, numerosos vecinos, miembros de la asamblea de inundados de Saavedra y militantes de Unidos y Organizados confluían en este lugar para comprender la problemática y debatir posibles soluciones.
Antes de comenzar, el comunero del Frente para la Victoria, Pablo Ortíz Maldonado, informó sobre la presentación de un proyecto de ley en la Legislatura para crear una Comisión  Especial de Seguimiento de las Obras y Arreglos en la cuenca del arroyo Medrano, integrada por legisladores, representantes de asambleas del Barrio Mitre y de  inundados de Saavedra y miembros de la Junta Comunal de las Comunas 12 y 13. Entre sus funciones se encuentran observar, analizar y estudiar planes de obras estructurales y no estructurales y un plan de contingencia para mejorar el estado de vulnerabilidad pluvial de la cuenca, sugerir y elevar propuestas legislativas para el mejoramiento de esta área, pedir informes y documentación al Ministerio de Desarrollo Urbano porteño.
Guiado por diapositivas explicativas, Sorín advirtió que si el gobierno porteño hubiera hecho menos estaríamos mejor: apuntó que alentó la expansión del negocio inmobiliario, incrementando así el valor del suelo y generando complicaciones en el transporte urbano para trasladarse de norte a sur. En ese sentido, el especialista dio cuenta de la problemática del suelo urbano: se transformó en una mercancía  y no es concebido como un bien social para el acceso de la población.
Tras un análisis retrospectivo sobre cómo se dio el proceso de "ganarle tierras al agua" a través del entubamiento de los arroyos que atraviesan la Ciudad, Sorín apuntó que la distribución de la tierra en la Ciudad es "absolutamente inequitativa" ya que el macrismo "no tiene en cuenta a la población e invisibiliza la problemática de acceso a la vivienda".
En esa línea, el también integrante de Carta Abierta argumentó que hubo un boom de la construcción en zonas donde no era necesario porque no hubo incremento poblacional, por ejemplo las comunas del norte, mientras que en las del sur hubo mayor crecimiento demográfico pero no se vio reflejado en construcción habitacional. Es decir, las inundaciones no son naturales sino consecuencia de esta política. 
Como una clase, los presentes iban preguntando y acotando información, en particular vivencias sobre las inundaciones sufridas en los barrios de la Comuna 12. Entre las causas se mencionaron: la quita del adoquinado provocó que sólo el 5% del agua se infiltre, la red de desagües es vieja y no están limpias, la falta construcción de bocas de tormenta y de espacios verdes, la disminución de la arboleda, entre otras.
Cuando promediaba la charla, el cielo tronó y se largó una de esas tormentas que ponen en alerta a los vecinos de estos barrios. Ante cada lluvia sucede lo mismo porque no se han hecho las obras necesarias. El invitado apuntó que es necesario contar con un plan de regulación de inundaciones y un nuevo Código de Planeamiento Urbano, ya que el que está en vigencia data de 1977 y no da cuenta de el contexto actual.
Todos coincidieron en que tiene que haber regulación del suelo y del mercado por parte del Estado porque, de lo contrario, el problema seguirá empeorando. Además, Sorín advirtió sobre la subejecución presupuestaria del macrismo para llevar adelante el Plan de Obras Hidráulico a pesar de que había emitido deuda para hacer las obras. 
Cuando la lluvia ya había parado, el encuentro iba llegando a su fin. Tras un intercambio fluido y variado, quedaron muchas reflexiones y propuestas de trabajo, pero en donde todos acordaron es en involucrase, movilizarse y organizarse para controlar que el gobierno porteño cumpla con la ley y promover la actualización del Código de Planeamiento Urbano para que no se inunde más la Ciudad.